Ayuda Solidaria

¿Cuántas veces al año escuchamos las palabras Ayuda Solidaria? Yo creo que muchas más de las que nos damos cuenta. El tema es ¿cuántas de estas veces de verdad ayudamos?

Hoy ando idiota con el tema simplemente porque no me gusta como ciertas personas lo abordan.

La ayuda debe ser del corazón, si la causa nos llega, si nos conmueve no debiéramos siquiera pensar dos veces antes de meternos la mano al bolsillo o buscar una solución real al problema presentado.

Veo mucha gente que rasga vestiduras, que se da con toda la cordillera en el pecho, que rezan día a día por un mundo mejor pero que en el fondo no hacen realmente nada por ayudar a quien lo necesite.

Y no me digan que darle trabajo de nana una vez a la semana a un profesional es ayudar.

El trabajo, cualquiera sea este, dignifica. Completamente de acuerdo pero ¿no sería mejor mover tus contactos para ver si la ayudas a encontrar un trabajo acorde a sus reales capacidades profesionales?

Oh! Chicos! De verdad tengo rabia!

No tengo muchos contactos, pero estoy haciendo mi mejor esfuerzo para obtener contactos y lograr encontrar un trabajo digno. Pero por lo pronto a mí por lo menos no me cuesta meterme la mano al bolsillo en forma anónima y ayudarla.

No se trata de limosna, la limosna se da a una persona extraña que normalmente vive de eso. Este caso es distinto, es una ayuda momentánea mientras su situación mejore lo cual espero sea pronto.

Rabia tengo porque hay personas a su alrededor que teniendo mucho no hacen nada, rabia tengo porque esas mismas personas se dan con la cordillera en el pecho, ayudan con dos pesos y luego se vanaglorian de ello.

No quiero ser la Madre Teresa, pero la inutilidad de algunas personas frente a estos temas me deprime y me exaspera.

La mejor ayuda, la que de verdad es recompensada, es esa efectiva, anónima y hecha con el corazón.

Por lo menos toda esta situación enfría mi corazón frente a otros temas. Pero no sé si me ayudan realmente a olvidar. El espacio de mi corazón es muy grande y de momento siento que nada ni nadie logrará llenarlo.