Accidente

Ayer fue un día muy extraño, a veces la vida se confabula en contra nuestra y nos muestra su por cara.

Por la mañana iba bajando una escalera que da al subterráneo pues tenía que ir a la bodega a buscar algunos materiales, en el segundo escalón algo pasó que resbalé y llegué abajo arrastrándome por las escaleras.

No me quebré ningún hueso, tampoco tuve ningún esguince, pero el dolor fue muy fuerte.

Como sé que Mr. Right se ha caído varias veces, le mandé un correo preguntándole qué toma habitualmente para cuando se cae. Me respondió y luego vino lo malo. Comenzó a decirme que una prima había llegado hasta mi y que había leído muchas de las cosas que publico.

Ok, seamos sinceros ¿quién podría estar escarbando entre sus cosas? ¿Su prima? Pues no lo creo. Creo que tiene a otra que encontró mi nombre y comenzó a escarbar para saber quién soy yo.

¡Si supiera que apenas soy más importante que sus cactus!

La cuestión es que él no supo dar explicaciones y simplemente cortó con lo que para él era más sano: me eliminó de todas sus redes sociales, como si eso me hiciera desaparecer del mapa.

Me molesté mucho, me dolió mucho más que los golpes que recibí por la caída en la escalera. ¿Cómo no fue capaz de decir que somos amigos desde hace casi 5 años y que nuestra relación la mayor parte del tiempo ha sido netamente amistad?

Cree que lo van a apuntar con el dedo, cree que le van a decir que engañaba a su ex conmigo. Nosotros jamás dejamos de hablarnos, de comunicarnos, no nos veíamos pero conversábamos seguido. Mientras estuve con Mr M él se transformó en mi confidente, en mi apoyo en esos momentos en los que necesitaba de una palabra de aliento, él estaba con su ex y hacía lo mismo.  Todavía recuerdo la vez que lo alentaba para que se fuera a vivir con ella.

En fin, me dolió su inmadurez para tratar el tema con su prima, eso considerando si es que realmente se trata de su prima.

¿Y si no fuera su prima? ¿Y si fuera alguien más? Él tiene super claro que el día que yo o él comience a salir con alguien, este juego se acaba, porque no quiero interferir en su vida, no quiero ser eternamente la que está en las sombras.

Eso es lo que me dolió, no sus palabras, sino su acción. Seguir manteniéndome en las sombras me tiene aburrida y ahora más que nunca. El saber que en el fondo no quiere que nadie sepa que somos amigos, más que amigos como me confesó ayer por teléfono, me hace cuestionar sus regalos, sus palabras, todo lo que viene de él.

Cada cierto tiempo siento que me trata como una basura,  como algo feo que hay que esconder…

Hoy me duele todo el cuerpo producto de los golpes del día de ayer, pero más me duele el corazón.