Un minuto de Relax

Hace rato que no me daba un minutito para mi, para hacer las cosas que me gustan y buscar un poquito de sentido a mi vida.

El lunes pasado fui a una terapia de Reiki: Se las recomiendo, siento que todo dentro de mi cambió.

A lo mejor tenía que buscar mi centro para poder volver a estar alineada y sentirme bien otra vez. Nuevamente me siento así, tanto, que nisiquiera he peleado con mi mamá. Eso es mucho decir.

Estas semanas han sido algo planas: nada por aquí, nada por allá... sin moros en la costa... nada entretenido. Lo único que pudo ser entretenido pero no, fue un amago de reunión con las Divinas. Lamentablemente a última hora tuve un problema y no pude llegar. Durante la semana me enteré que sólo llegó una y, al no encontrar a nadie, se devolvió a su casa.

Espero que este viernes sí podamos juntarnos. Tengo ganas de bailar. Se abrió una pequeña disco nueva que tiene esa típica facha de disco de los 70's y 80's: quiero llevarlas ahí y bailar un ratito ¡hace tanto que no lo hago! capaz que a la primera me canse, me tire en la silla y de ahí no me mueva más. Pero quiero probar.

Ayer por la noche vino a verme una de mis divinas. Conversamos por horas encerradas en mi pieza, tomando y fumando, fue muy entretenido. Pero la conversación me hizo pensar tanto, en tanta gente, tanta desgracia que hay y que uno ni se imagina. Entonces uno se da cuenta que lo que tiene es mucho más valioso de lo que aparenta y que hay que cuidar cada día lo que se nos da.

Hermanos distanciados, padres enfermos, personas que no son capaces de distinguir entre lo que está bien de lo que está mal, maridos incomprensibles, problemas mentales... ufff... tantas cosas. Yo por lo menos me considero algo más normal. Bueno, dentro de lo que se le puede pedir a una persona que quería ser astronauta o irse a cultivar choros zapatos al lago Chungará...